Gian Lorenzo Bernini, el gran sucesor de Michelangelo
Gian Lorenzo Bernini, el gran sucesor de Michelangelo
Un artista innato creció bajo el techo de un escultor y con el tiempo se transformó en uno de los escultores más famosos y respetados de toda Europa
Un artista innato creció bajo el techo de un escultor y con el tiempo se transformó en uno de los escultores más famosos y respetados de toda Europa
Un talento innato sale a relucir
Gian Lorenzo Bernini (1598-1680) fue un pintor, escultor y arquitecto italiano destacado por el dramatismo de sus obras. Un talento único en su estilo fue moldeado por su padre, quien también fue un escultor y se convirtió en su único mentor.
Bernini no estudió en ninguna academia de artes, sabía únicamente leer y escribir. No dominaba el latín por lo que no podía leer la gran mayoría de los textos sobre arte. Esta "ignorancia" le sirvió para desarrollar su propio estilo y forjar su individualidad, no tenía que seguir ningún tipo de parámetros ni darle explicaciones a ningún académico por sus decisiones.
La absoluta libertad creativa que tenía en el estudio de su padre -que fue donde aprendió a pintar y esculpir- lo ayudó a perfeccionar sus técnicas, lo inspiraba el estilo helenístico, que buscaba transformar los clásicos retratos en maravillosas representaciones de dioses.
Sus esculturas son reconocidas por plasmar en piedra escenas completas en movimiento, su capacidad de captar la emoción y la tensión en la piedra es lo que hizo que su trabajo fuera tan reconocido y famoso.
"Éxtasis de la beata Ludovica Albertoni" (1671 al 1674)
Una de sus últimas esculturas, la terminó cuando tenía 71 años y se encuentra en la Iglesia de San Francesco a Ripa de Roma.
Tenía un talento completamente particular para expresar las cosas con la palabra, el rostro y la gesticulación, y para hacerlas ver tan agradablemente como los más grandes pintores han sabido hacerlo con los pinceles.
Fréart Chantelou
Chantelou era un importante coleccionista y mecenario francés que conoció y estudió de primera mano el trabajo de Bernini.
Apolo y Dafne (1622-1625)
Sus obras siempre ilustraban cuentos mitológicos o religiosos. Apolo fue un joven que se enamoró perdidamente de la ninfa Dafne, pero ella no sentía ningún tipo de afecto por él, un día Apolo comenzó a perseguirla y ella pidió auxilio a su padre quien la convirtió en árbol de laurel. Desde ese entonces, Apolo declaró que todas las personas llevarían coronas de laurel como señal de victoria, en honor a su amada. En la obra se puede ver como Dafne se transforma en árbol.
El artista favorito de la Iglesia Católica
Su talento comenzó a regarse por toda Italia y enseguida se convirtió en uno de los artistas más emblemáticos del país, algunos lo comparaban con el grandioso Michelangelo.
Comenzó a trabajar como retratista de papas y reyes, se convirtió enseguida en el arquitecto más icónico del arte barroco italiano. Su gran habilidad para plasmar diferentes texturas en mármol lo posicionó en el mercado de las artes religiosas, trabajando directamente bajo órdenes del papa.
Por más de 60 años trabajo de la mano con la iglesia para convertir a Roma en la capital no solo religiosa sino también artística de la religión católica.
El evidente favoritismo por Bernini, desató una serie de dramas y conflictos con los demás artistas italianos que luchaban por trabajar bajo las lucrativas mantas del vaticano, es por esto que a Bernini se le recuerda como un artista solitario.
Bernini además de ser un talentoso escultor, se destacaba como pintor, manejando perfectamente la iluminación.
Este es uno de sus autorretratos, un óleo sobre lienzo. Uno de sus primeros experimentos con el uso de la luz.
"El Rapto de Perséfone"
Esta es una de sus obras más emblemáticas, representa el rapto de Proserpina (Perséfone en la mitología griega) por Plutón (Hades en la mitología griega) el rey del inframundo.
Bernini es conocido por la delicadeza de sus trazos, pese a que la escultura representa un secuestro, la forma en la que los dedos de Hades se hunden en la piel de Perséfone luce sumamente delicada y realista.
Un arquitecto innato
Bernini se destacó por numerosas creaciones arquitectónicas en toda Roma, pese a no haber estudiado, empíricamente logró diseñar algunos de los edificios más emblemáticos de toda Roma, como por ejemplo:
-La Capilla Cornaro
-La Plaza San Pedro
-La Fuente de los Cuatro Ríos
Entre otras icónicas estructuras, es por esto que a Bernini pese a que su nombre no es tan reconocido como otros italianos (como Da Vinci o Raffaello), se le considera el padre de la arquitectura italiana y el principal sucesor de Michelangelo.
Por Mary Villarroel Sneshko | @Vivodesorpresas | Culturizando
Con información de NatGeo