La misteriosa muerte de Atila, el rey de los hunos

Atila fue el rey de los hunos, también era llamado el azote de los dioses ya que saqueaba todo lo que estaba en el medio de su camino a la victoria. Sus grandes contiendas le dieron el título de emperador de Europa.

Junto a su ejército, Atila invadió gran parte del territorio europeo, desde Europa Central hasta el mar Negro y desde el Danubio al mar Báltico.

Atila provenía de Mongolia. Aunque sus orígenes no son oficiales, se cree que pertenecía a un grupo de mongoles y turcos de las tribus nómadas del norte de China y Mongolia. La tribu que dirigía Atila fue una de las más avanzadas en cuanto a fabricación de armas.

La idea de Atila era invadir Constantinopla, pero Flavio Constantino lo impidió junto a su ejército. Pero los bárbaros de Atila continuaban causando caos y destrucción a su paso.

La mayoría de los emperadores de esa época estaban acostumbrados a una cierta extravagancia en las reuniones públicas, pero Atila era todo lo contrario. Las representaciones le muestran como un bárbaro templado. La mayoría de sus objetos eran de madera, mientras que para sus huéspedes dejaba el oro y la plata. Sus vestidos también eran simples, sin ningún adorno.

La muerte de Atila también fue un evento entre sus seguidores. Él falleció en el año 453 y fue en la noche de su boda, la opinión sobre su muerte se divide, unos dicen que se dejó llevar por la gran cantidad de alcohol que bebió esa noche y que luego de la celebración cayó desmayado y tuvo una hemorragia nasal que lo hizo ahogarse con su propia sangre.

Otros afirman que Atila fue asesinado por su esposa quien clavó una daga en la cara de su esposo mientras tenían sexo la misma noche de bodas.

Cuando sus tropas descubrieron el cuerpo, se cortaron el pelo y se hirieron la piel con sus espadas. Ellos aseguraban que al 'más grande de los guerreros' no lo podían llorar con lágrimas sino con sangre.

Atila fue enterrado en un triple sarcófago de oro, plata y hierro, junto con una parte de sus riquezas. Todos los soldados que participaron en el funeral fueron sacrificados para que nunca se rompiera el secreto de dónde descansaban los restos del rey de los hunos.

La muerte de Atila significó el final del avance de los hunos, ya que nadie, ni siquiera sus hijos, supo continuar con sus conquistas.



Titi González Méndez | Culturizando
Con información de historiageneral.com