Noctambulismo: ¿Decisión o condición genética? Descúbrelo…
Noctambulismo: ¿Decisión o condición genética? Descúbrelo…
No te has preguntado, ¿por qué solemos concentrarnos mejor durante la noche?, o ¿cuál es la razón por la que no podemos dormir cuando debemos? Si la respuesta es sí, lo más probable es que seas un noctámbulo, por lo que tus patrones de sueño potencian más tu cuerpo durante la noche. ¡Entérate de más!
No te has preguntado, ¿por qué solemos concentrarnos mejor durante la noche?, o ¿cuál es la razón por la que no podemos dormir cuando debemos? Si la respuesta es sí, lo más probable es que seas un noctámbulo, por lo que tus patrones de sueño potencian más tu cuerpo durante la noche. ¡Entérate de más!
El diccionario define el noctambulismo como el hábito de ejecutar durante la noche la actividad que usualmente hacemos durante el día. Esta conducta no es algo fuera de lo común, al contrario, investigaciones han demostrado que las personas se dividen en dos cronotipos: aquellos que se adaptan mucho más fácil a los horarios nocturnos son considerados “búhos”, mientras los que madrugan y tienden a acostarse más temprano los conocen como “alondras”.
Antes de darte cuenta cómo tus patrones de sueño afectan la salud del cuerpo es necesario aclarar que los noctámbulos son diferentes a los sonámbulos. Sin embargo, la humanidad ha confundido estos términos como sinónimos durante años.
El sonambulismo es conocido como una perturbación del sueño en la que una persona se expone a incontables peligros por realizar cualquier tipo de actividad aún dormido sin importar la hora del día.
Una mutación genética
Según los expertos en genética de la Universidad Rockefeller en Nueva York, la conducta que adoptamos para nuestros momentos de descanso es directamente proporcional a las mutaciones de nuestro ADN.
Si te consideras un “búho”, lo más probable es que tu energía y capacidad cognitiva es más activa durante la noche. Esto es denominado síndrome de la Fase del Sueño Retrasada, un proceso químico en el que las hormonas que segrega el cerebro como el cortisol (la hormona del estrés) o la del crecimiento, se sincroniza con los procesos de sueño o vigila.
El cuerpo, al verse influenciado por estas mutaciones genéticas, comenzará a producir estas hormonas en horas que él considera debe estar despierto. En el caso de los “búhos” la reacción ocurre durante la noche por lo que se permanece despierto. Este proceso es denominado alteración del ritmo circadiano.
Los ciegos son más propensos a padecer los trastornos del noctambulismo. Ellos, por lo general, no logran sincronizar el ciclo de sueño y vigilia a las 24 horas del día, en tal sentido su fase de sueño retrasa más y más cada día.
La asociación Circadian Sleep Disorders Network da un buen ejemplo sobre los ciegos:
Si la persona se duerme a medianoche y se despierta a las 8 de la mañana un día, puede ser que no pueda dormirse hasta la 1 o las 2 de la mañana de la noche siguiente, y tendrá que dormir proporcionalmente más tarde la próxima mañana.
El retraso no se detiene a la 1 o las 2 de la mañana, sino que sigue empeorando cada día hasta que la persona se duerme a las 4 de la mañana, 10 de la mañana, 2 de la tarde, etc. Al final, la fase de sueño se retrasa 24 horas y la persona vuelve al punto de partida.
De alondras a búhos
Existen individuos cuyas actividades se ven constantemente afectadas por la desorganización del sueño, por lo que tienden a acostarse muy tarde y levantarse muy temprano lo que produce agotamiento mental y daños físicos eventuales.
Si hacemos memoria, cuando éramos niños nuestros padres solían mandarnos a acostar muy temprano. Indirectamente, nos programaban para ser “alondras”, eso explica por qué los niños suelen levantarse antes que los adultos.
Sin embargo, mientras transcurre el crecimiento, los cambios hormonales van jugando un papel muy importante. Los hábitos de sueño comienzan a amoldarse al criterio del adolescente generando una transformación a “búhos”.
- Contra: Las personas que adoptaron patrones de sueño diurnos, al permanecer despiertos durante la noche, comienzan a desarrollar estándares de alimentación malsanos.
- Pro: Algunas hipótesis afirman que los noctámbulos tienden a ser más inteligentes que las “alondras”.
- Contra: La mayoría de los noctámbulos se exponen a largas sesiones con aparatos electrónicos. La luz artificial de las computadoras y teléfonos inteligentes puede causar descontrol metabólico.
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- Pro: Si eres un “búho” considérate afortunado. La Universidad de Alberta ubicada en los Estados Unidos, comprobó que los noctámbulos incrementan su fuerza natural por la noche, a diferencia de los diurnos que mantienen niveles de fuerza inmutables.
- Contra: ¡Cuidado con la diabetes! Las personas adultas que mantuvieron patrones de sueño diurnos, posiblemente mantuvieron malos hábitos alimenticios por comer a altas horas de la noche durante muchos años. Una investigación de la Universidad de Northumbria, Reino Unido, demostró que estos individuos son más propensos a desarrollar problemas cardíacos y diabetes tipo 2.
- Pro: La creatividad se dispara más por la noche. La Universidad del Sagrado Corazón, Milán, comprobó que las personas que se enfrentan a la resolución de problemas o a la creación de proyectos son más eficaces que los diurnos.
Christopher Gutiérrez | @diamantesgopro | Culturizando
Fuentes: ABC | Doctorestivill | Circadian sleep disorders