Huracanes desatan su poder

En teoría, la categoría 5 no tiene un límite superior, pero en la práctica, los vientos de un poderoso huracán podrían "hacer estallar la escala", a decir de los especialistas en meteorología.
 "No existe tal cosa como una tormenta de 'categoría 6', en parte porque una vez que los vientos alcanzan el estatus de categoría 5, no importa cómo es que se le pueda llamar, solo es realmente, realmente malo", coinciden expertos en un artículo de la revista LiveScience.

El poder de 'Irma'
Los huracanes utilizan las aguas cálidas como combustible. ''Irma'' ha estado sobre agua que está entre 0.7 y 1 grado centígrado más caliente de lo normal. Y esa agua caliente es más profunda de lo habitual.
Mientras se mantuvo el martes sobre el Océano Atlántico, los vientos de 297 kilómetros por hora de este meteoro impusieron un récord para la región.

Otros 'monstruos'
En todo el Atlántico, el Caribe y el Golfo de México, solo el huracán "Allen", de 1980 fue más fuerte con 305 km/h. Otras tormentas con vientos de 297 km/h: una que llegó a Florida en 1935, "Gilberto" en 1988 y "Wilma" en 2005.

Efecto calentamiento global
Existe un debate científico sobre si el calentamiento del planeta significa que haya un mayor número de meteoros, pero en general los científicos aceptan que sean más fuertes y húmedos.
Basado en las actuales condiciones oceánicas y atmosféricas en la Tierra, el potencial máximo estimado para los huracanes es de unos 305 kilómetros por hora, según un cálculo de 1998 por Kerry Emanuel, climatólogo del Massachusetts Institute of Technology.
Pero Chris Landsea, meteorólogo del Centro Nacional de Huracanes, considera que en los peores escenarios de calentamiento global, en donde las temperaturas aumenten 1.8 grados adicionales solo habría un cambio de 5% total para finales del actual siglo. Así, la fuerza de los vientos no superaría los 322 km/h.
(Con información de AP/NTX)

Huracanes del Atlántico que han tocado tierra como categoría 5

• El 3 de septiembre de 1935, el llamado "Huracán del Día del Trabajo" tocó tierra en los Cayos de la Florida, causando 408 muertes.
• El 28 de septiembre de 1955, el huracán "Janet" llegó a Chetumal, México, y causó la muerte de más de 600 personas.
•  El 2 de septiembre de 1977, el huracán "Anita" azotó Tamaulipas, México, registrándose al menos 10 muertes.
•  El 17 de agosto de 1969, el huracán "Camille" tocó tierra cerca de Biloxi, Mississippi, y mató a 256 personas.
•  El 29 de agosto de 1979, el huracán "David" se abrió paso hacia la isla de Dominica, cobrando más de 2,000 vidas.
•  El 14 de septiembre de 1988, el huracán "Gilberto" azotó Cancún, México, matando a 327 personas.
•  El 24 de agosto de 1992, el huracán "Andrew" llegó a Miami y causó la muerte de 65 personas.  
• El 21 de agosto de 2007, el huracán "Dean" tocó tierra cerca de Majahual, México, matando al menos a 13 personas.
•  El 4 de septiembre de 2007, el huracán "Félix" azotó la Costa de Mosquitos de Nicaragua, causando 101 muertes.

(Con información de AP)

Todos los huracanes tropicales tienen un nombre propio, elegido con antelación y fácil de recordar para facilitar la gestión de la emergencia.
El uso de un nombre corto reduce el riesgo de error. "Es mucho más fácil de memorizar que una cifra o un término técnico", según la Organización Meteorológica Mundial.

Listas alfabéticas
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos tiene seis listas de 21 nombres, cada una para el Caribe, el Golfo de México y el Atlántico Norte, utilizando una cada año.
Las listas siguen un orden alfabético y se saltan las letras con las que es muy difícil encontrar un nombre, como la Q y la U.
Al cabo de seis años, se vuelve a retomar la primera lista. Pero, cuando un huracán provoca muchas víctimas y daños, se retira su nombre. Así, no habrá más "Katrinas".

Polémicos
Las propuestas de nombres vienen de los organismos regionales, pero la OMM se pronuncia al respecto e interviene para evitar eventuales polémicas.
Así, en 2015, retiró el nombre "Isis" de la lista en la región Norte-Pacífico, puesto que es uno de los acrónimos en inglés del grupo yihadista Estado Islámico.

De santos y amantes
Desde fines del siglo XVIII, se ponen nombres a los ciclones. Hasta principios del siglo XX, los que golpeaban las islas españolas del Caribe eran llamados según el santo patrono del día.
Durante la Segunda Guerra Mundial, los marinos estadounidenses empezaron a bautizarlos con los nombres de sus mujeres o amantes. 
En 1953, la Oficina meteorológica estadounidense empezó a tomar también nombres de mujeres, pero en los años 1970, las feministas protestaron contra esta asociación.
En 1979, se estableció la paridad, con una alternancia de nombres propios femeninos y masculinos.
(Con información de AFP)