El misterio de los 27.000 soldados alemanes desaparecidos en la Segunda Guerra Mundial
El misterio de los 27.000 soldados alemanes desaparecidos en la Segunda Guerra Mundial
Un contingente de 50.000 soldados alemanes fue capturado y enviado a Estados Unidos luego de la guerra. Solo 23.000 regresaron, nadie sabe el paradero de los 27.000 soldados de plomo restantes.
Un contingente de 50.000 soldados alemanes fue capturado y enviado a Estados Unidos luego de la guerra. Solo 23.000 regresaron, nadie sabe el paradero de los 27.000 soldados de plomo restantes.
La captura
El peligroso ejercito de plomo
Recién terminada la Segunda Guerra Mundial, un grupo de militares norteamericanos, compuesto por un coronel, un teniente y 3 soldados, entraron en el museo de Hersbruck, cerca de Nuremberg. En sus instalaciones encontraron una de las colecciones de soldados de plomo más increíbles de las que se tiene registro.
Los norteamericanos inmediatamente ordenaron la "captura" de este contingente alemán, que consistía en unas 50.000 piezas, perfectamente detalladas, bajo el pretexto de que estos soldados de plomo podían ser utilizados para realizar ejercicios de maniobras militares.
La búsqueda
Durante varios años nada se supo de los soldados de Hersbruck, pero en 1952 durante el llamado "milagro alemán", los encargados del museo decidieron tomar cartas en el asunto e iniciar las pesquisas necesarias para traer de vueltas a sus tropas perdidas.
Con la diligencia que caracteriza al pueblo alemán, los curadores comenzaron enviando correspondencia por la vía oficial, primero a las autoridades norteamericanas que todavía se encontraban en suelo alemán, luego recurrieron a la vía diplomática y en último recurso se dirigieron directamente al presidente de Estados Unidos, Dwight D. Eisenhower.
En todos los casos dieron con una pared de negativas burocráticas.
Como último recurso decidieron escribirle una nueva misiva al presidente Eisenhower, y para mala suerte de él, la carta se filtró a la prensa, obligándolo a tomar cartas en el asunto.
Regreso a casa
No se engañen por la sonrisa, el tema de los soldados de plomo se convirtió en un quebradero de cabeza.
Eisenhower ordenó realizar una profunda investigación acerca del caso, para poner un poco de luz en la desaparición de las diminutas tropas.
Las pesquisas dieron fruto, y parte de la colección (unas 20.000 piezas), fueron encontradas en un sótano de un edificio oficial en la ciudad de Nueva York. Otra parte fue encontrada en manos de un coleccionista particular en Texas, sin que se sepa cómo llegaron a sus manos.
En total fueron recuperadas y devueltas 23.000 piezas de la colección, las restantes 27.000 continúan siendo un tema de conversación entre los coleccionistas.