Babadook: De monstruo del cine a ícono LGBT ¿Conoces la historia?

Muchas personas han sido definidas como íconos para la comunidad LGBT. La mayoría son estrellas que han sido muy abiertas en la defensa de sus derechos como Madonna o Cher, e incluso algunas que nunca se mostraron muy vocales en el asunto, pero que inspiraban con sus ideas, sus interpretaciones o sus visiones del mundo como Judy Garland y Joan Crawford.

Ahora, un nuevo integrante se une a esta larga lista de celebridades. Su primera y única aparición fue en la película "The Babadook" que, obviamente, lleva su mismo nombre.

Ok, vamos por partes. Obviamente se preguntan, ¿cómo diablos una criatura de semejante atrocidad se convierte en un ídolo? Pues, solo falta adentrarnos en el lugar donde comenzó todo: Netflix

Era un día normal en la plataforma de streaming cuando de repente unos usuarios empezaron a notar algo extraño en una de las cientos de categorías que Netflix propone para encontrar contenido en específico.

Resulta que "The Babadook" se encontraba dentro de la categoría LGBT, la cual está dedicada a contener películas que muestren o resalten historias que tengan que ver con la comunidad. Con esto no queremos desprestigiar la elección de Netflix de colocar esta cinta en este selecto grupo, pero vamos, una historia sobre una criatura que sale de un libro infantil a atormentar a una mujer y su hijo, no es precisamente una historia del género. ¿O sí?

Esto fue a finales del año pasado, pero como casi todo en Internet fue agarrando importancia hasta inicios de este mes cuando, en vista de que era el Mes del Orgullo LGBT, el tema de Babadook y su verdadero significado volvieron a tomar potencia.

Como el fuego valirio (disculpen por la referencia de Juego de Tronos), el meme del Babadook asumiendo su homosexualidad y su importancia en la comunidad se esparcieron por todas partes. Esto ha generado una cantidad innumerable de muestras de admiración en los medios.

Y, si esto aún no es suficiente ya son varios los críticos y analistas de cine y de la psicología que han encontrado bastante comprensible en porque el Babadook, de entre todo lo que pudiera haber salido erróneamente en la sección de Netflix, captó la atención del público LGBT.

En un artículo de Rolling Stone lo explican muy bien: el Babadook representa ese sentido de ser diferente a la perfección, es una presencia que se hace más latente a medida que más quieren negarla u oprimirla. Esto junto a la apariencia que posee la criatura así como su final en la película (SPOILER) en la cual termina siendo aceptado por Amelia y su hijo y termina viviendo en el sótano (SPOILER), configuran las características que, en pocos meses, ha hecho que el Babadook se vuelva una representación de cierto tipo de las penurias que muchos de los miembros de la comunidad LGBT han tenido que enfrentar.

Haya empezado como una simple broma o no, el Babadook es ahora uno más de los muchos íconos que se volvieron importantes para la comunidad LGBT. Al igual que muchos de ellos, el Babadook nunca tuvo la intención de ser más de lo que representaba, pero terminó calando en el público. Ahora, hay que esperar a que la próxima gran inspiración de la comunidad se manifieste, aunque no venga de un libro de cuentos.