LTD: el Ford que emuló a Rolls-Royce

“Más silencioso que un Rolls-Royce” era la consigna con la que el LTD llegó a los anuncios de televisión, los cuales aseguraba que el único ruido que se percibía en un Rolls a 90 kilómetros por hora era el del reloj. Ford prometía que su LTD era 2.8 decibeles más silencioso. Y, sí, también contaba con un reloj.

El LTD no era realmente un Rolls-Royce. Era la versión más lujosa del Galaxie 500. Contaba con asientos y vidrios eléctricos, panel con imitación de madera y aire acondicionado. Sin embargo, hasta ese momento, no había un auto del mercado masivo que tuviera este nivel de equipamiento. Su lanzamiento obligó a que Chevrolet equipara el Impala Caprice como un Cadillac y que Chrysler lanzara versiones VIP en Plymouth y en Dodge.

La motorización era parte del encanto del modelo. Se usaba el V8 de 289 pulgadas cúbicas y 200 caballos de fuerza. Estaba unido a la transmisión Cruise-O-Matic automática, la cual estaba muy orientada al confort.

LTD era una abreviación de Limited, pero realmente no hubo nada de limitado en la producción del Galaxie. Los números de serie eran los mismos que en los que se utilizaban en las versiones más económicas y durante el primer año se produjeron más de 100 mil unidades.

Dos años después de presentarlo como versión del Galaxie, Ford decidió convertirlo en una línea independiente, aunque, bajo la piel, seguía estando basado en la misma plataforma. El LTD de los años 70 fue muy popular en el País.
Con sus faros cubiertos y líneas anguladas tenía las proporciones de un Lincoln pero sin el precio. El modelo sufrió un cambio de generación afortunado hacia finales de esa misma década, mantuvo el diseño angulado y cuadrado pero con líneas más definidas y modernas.

En México, el LTD se mantuvo hasta 1982, cuando la marca decidió reemplazarlo con otra leyenda, el famoso Grand Marquis.