Chevrolet Blazer: deportivo en grande

Mira por el espejo retrovisor: una parrilla atemorizante y un musculoso frente vienen detrás de ti, luce como un Camaro alto y, parece capaz de correr como uno. Se trata de la nueva Blazer de Chevrolet.

Quizá el nombre te resulte conocido: durante años, Chevrolet ofreció en México esta camioneta con una construcción tradicional de carrocería sobre bastidor. Posteriormente, este modelo se transformó en la Trailblazer, que llegó a tener motor V8 y una versión de 3 filas de asientos, pero conservaba la construcción tradicional de carrocería sobre chasis.

Para el 2019, la Blazer regresa, pero con un nuevo enfoque. Para empezar, ahora su construcción es tipo automóvil, con construcción integral que combina carrocería y bastidor para disminuir el peso.

Deriva de la plataforma de la Traverse. Esto significa que el motor está montado transversalmente y que su tracción es delantera, además tiene suspensión trasera independiente con 5 brazos.

Tiene un diseño tipo techo flotante y enormes llantas eNuestra versión equipada RS tenía llantas P235/55R20, montadas en rines con diseño novedoso.

La nueva Chevrolet Blazer no es un “perro que ladra y no muerde”. Su manejo es muy vivo y con mucha actitud; alienta a conducir por placer.

Aunque pesa casi dos toneladas y mide casi 5 metros de largo, es ágil y responde con rapidez en curvas y maniobras evasivas. Y al moverse comunica bastante bien las condiciones del camino al conductor, con lo que puede tomar decisiones rápidamente.

La calidad de marcha es bastante firme, pero a cambio de este leve sacrificio de comodidad la Blazer tiene inclinación muy moderada en curvas, lo cual es sorprendente considerando la altura libre sobre el piso de 18.9 centímetros.

La suspensión trasera destaca por ofrecer corrección de vía, es decir que en curvas cerradas es como si metiera a la curva al auto.

Y responde con rapidez a los movimientos del volante, lo que refuerza la sensación de ligereza y vuelve muy divertida la experiencia.

Uno de los mayores atractivos de la Blazer es su motor V6 de 3.6 litros de desplazamiento naturalmente aspirado; es potente pues tiene 308 caballos de poder y 270 libras-pie de torque.

Este motor tiene una rápida respuesta al acelerador y entrega la potencia de manera sedosa y urgente. Y al acelerar tiene un rugido agresivo y placentero.

Tiene una transmisión automática de 9 velocidades, que afortunadamente no tiene conflictos de personalidad, pues no se la pasa buscando constantemente el cambio correcto.

Ocasionalmente exagera en su deportividad, pues hace los cambios muy firmes. Un detalle extraño de la transmisión es que a pesar de la personalidad deportiva de la Blazer no incluye control manual ni paddle shifters para cambios.

Un detalle positivo que merece ser mencionado es que tiene frenos de disco en las cuatro ruedas y, por cierto, todos ellos son ventilados para mejor resistencia al uso intensivo.

El interior de nueva cuenta muestra la inspiración del Camaro en el diseño de sus salidas centrales de aire acondicionado, que tienen acentos rojos y son giratorias para regular la temperatura.

Un toque deportivo es la tapicería de piel, cuyas perforaciones tienen acentos en color rojo.  La instrumentación es completa y tiene una pantalla de 8 pulgadas reconfigurable, además de servicio de WiFi OnStar.

La cabina sería más cálida si se mejoraran los plásticos, aunque en la mayor parte de los puntos que tocan los usuarios son suaves y en algunos casos tienen costuras genuinas en color rojo.

El equipo de seguridad incluye 7 bolsas de aire, Monitoreo de Presión de Llantas y Puntos Ciegos en Espejos, Aviso de colisión frontal y detección de peatones, Advertencia de Tráfico Transversal, Advertencia y asistencia de salida del carril y cámara de visión de 360 grados.

Destaca por tener manejo deportivo y ágil con un diseño extrovertido, pero no cae en excentricidades con lo que seguramente resistirá bien el paso del tiempo.