Wild, wild RAM
Wild, wild RAM
Wild, wild RAM
Wild, wild RAM
La vida está llena de primeras veces. Justo como la que tengo enfrente: hoy me toca manejar una pick up con mil 133 kilos de carga. Se trata de la nueva Heavy Duty de RAM y el cargamento que llevaremos por las calles de de Las Vegas, por cañones y por carreteras son polines de construcción.
Pero, antes de eso, nuestros anfitriones hacen una demostración del poder de sus pick ups, con gigantescos remolques que acoplan y desacoplan cada vez con gran facilidad. Esto se debe a que la camioneta está equipada con una suspensión de aire trasera que baja la caja para conectar remolques de forma sencilla.
Hasta que llega el momento de la verdad: vamos a viajar con nuestros polines.
Y la primera sensación al manejar es el poder que se siente en el pedal del acelerador y que patea pidiendo más. Llevar nuestra preciada carga es muy simple: la camioneta hace todo el trabajo y, si bien hay que ser cuidadosos al dar vueltas y hacer cambios de carril por las dimensiones, en general, el manejo es extremadamente fácil.
Con carga, la camioneta se siente muy estable y afianzada al suelo. Eso sí, como es lógico, hay que cuidar un poco más los frenos y, para reducir la velocidad, hay que usarlos de forma anticipada, cuando es posible.
Luego de manejar en las calles de Las Vegas y en una carretera con rectas inmensas y mucho viento, llegamos a un cementerio de vehículos como salido de una película del viejo oeste.
Las Heavy Duty cuentan con un motor HEMI V8 de 6.4 litros de 410 caballos de fuerza y 429 libras pie de torque. Sin embargo, en el lugar están probando la versión equipada con un motor Cummins de 1,000 libras pie de torque y que son capaces de arrastrar poco más de 15 toneladas y de cargar 3.5.
En la carretera hay una prueba con un remolque de 16 toneladas, uno más pequeño y otro con herramientas de construcción.
Probamos los últimos dos y, si bien nuestra cargamento inicial no era nada pequeño, los usamos para esta parte del recorrido sí son más demandantes. Sin embargo, el trabajo se hace más simple, pues incluso contamos con cámaras de 360 grados que permiten monitorear la carga.
En los caminos de descenso el asistente de pendientes hace el trabajo por sí solo: basta soltar el freno y la camioneta, de forma automática, empieza a reducir la velocidad y a distribuir la potencia suavemente.
El recorrido incluye también una prueba off-road que sorteamos sin mayor contratiempo. Finalmente, vale la pena hablar de los interiores lujosos heredados de la pick up 1500 para algunas de las camionetas de prueba, con grandes asientos de piel, una gigantesca pantalla táctil de 12 pulgadas y toda la comodidad necesaria.
Créditos
Información y fotos: Melissa Rodríguez