El asunto del negocio en el cine
El asunto del negocio en el cine
Una cosa es hacer una película y otra lograr gente que esté dispuesta a pagar por verla. Para eso existe un sistema que se ocupa de hacerte llegar la obra del artista. Los mercados, las redes de promoción, el papel de la distribución cinematográfica.
Una cosa es hacer una película y otra lograr gente que esté dispuesta a pagar por verla. Para eso existe un sistema que se ocupa de hacerte llegar la obra del artista. Los mercados, las redes de promoción, el papel de la distribución cinematográfica.
Agentes de venta. Derechos de autor. Marketing audiovisual. Recaudos.
Todos hemos visto una película. En una sala de cine, en la programación de un canal de televisión y últimamente en internet. ¿Cómo llegan a esos espacios donde el público las puede visualizar?
La distribución cinematográfica
Es un proceso que va desde la idea hasta la creación de la obra. Implica el guion, rodaje, edición, sonido, música y demás elementos artísticos que vemos en un audiovisual. De la mano, encontramos la producción que incluye la realización de proyecto, presupuesto, financiamiento, administración, legalidades y recursos humanos, que hacen posible la producción de todo el audiovisual.
Como parte de ese proceso de producción está la distribución, -que no la hace el equipo de producción en sí mismo-, tarea que queda a cargo de una compañía o grupo dedicado a este proceso.
Distribución de una película
En palabras sencillas es una empresa que se encarga de llevar las películas al público. Para ello tienen dos tareas fundamentales: la promoción y comercialización de la obra.
La promoción es fundamentalmente todo el trabajo de mercadeo que se hace para que la película sea buscada por el público.
La comercialización ya implica todo el sistema de recaudo de dinero que produzca la obra; empieza con los contratos entre productora (distribuidor - exhibidor), cumpliendo el ciclo con la liquidación de las ganancias que produce la obra.
¿Qué son las ventanas de distribución?
Son los espacios donde la obra va ser difundida, sea una sala de cine comercial, sea en un video casero, sea a través de un canal de televisión, o por internet.
En la actualidad, con la instauración de la era digital, los formatos se han transformado y eso ha dado una nueva dinámica al proceso de distribución, las pantallas pululan y la gente sigue viendo material audiovisual.
Streaming, VOD, DCP, hipertextualidad, narración transmedia, -solo por nombrar unas cuantas palabras-, hacen parte del glosario del mundo audiovisual actual, una realidad que ha ido amoldando el trabajo que lleva a cabo la distribución audiovisual.
No todo es cine de Hollywood
Sin lugar a dudas, la industria de Hollywood posee la más poderosa cadena de distribución, de hecho los estudios más grandes poseen su propia distribuidora como el caso de Fox, Disney, Warner, Sony, por nombrar algunas.
Existen, claro está, otro tipo de distribuidoras que se enfocan en la cinematografía como la francesa, española, latinoamericana, asiática o africana.
Los mercados de películas
Estas se reúnen en mercados cinematográficos, donde hay compradores y vendedores del audiovisual que ofrecen en el mundo. Uno de esos mercados es el de Cannes, pero también está el de Natpe, Mipcom, o en Latinoamérica el del Festival de Cine de Guadalajara y Ventana Sur, en Buenos Aires.
El poder de la distribución
Como un punto a debatir, podemos decir que la distribución cinematográfica es un dispositivo de la industria cultural que articula la relación entre una película y su público. Como tal es la pieza de un sistema de producción de contenidos, que va desde el financiamiento, la producción, la distribución, exhibición y liquidación de ingresos.
Al ser un dispositivo que regula los contenidos que hacen parte de la programación anual de las salas de exhibición, influye en las propuestas que los espectadores tienen en la escogencia. Es una sutil labor de manipulación de contenidos, los gustos y los hábitos de la sociedad.