¿De qué color es tu energía?

El rojo es el color de la vitalidad, por lo que tu energía te conecta con todas las criaturas vivientes, lo que te hace extremadamente empático. Eres muy apasionado, a menudo sexual y lleno de energía. Estás centrado y cimentado en la tierra y totalmente auto-suficiente. Sin embargo, ten cuidado de ser demasiado competitivo ya que puede ser tu perdición.

Tiene buena salud, un carácter vibrante y vive la vida al máximo. Eres entusiasta, deportivo y, por lo general, intentas mantenerte positivo en la vida. La gente te aprecia porque iluminas cualquier conversación o situación. Sin embargo, ten cuidado, porque una superabundancia de esta energía podría significar que tienes dificultades con la obsesión, la adicción y el deseo.

Estás espiritualmente inspirado o experimentando un despertar espiritual. Eres lúdico y espontáneo y te sientes cómodo tanto con actividades físicas como intelectuales. Tus amigos te describen como una persona inteligente e increíblemente capaz, pero a menudo te sientes presionado para lograr tus objetivos y obtener puntajes altos en las pruebas. También le temes al cambio.

Eres un comunicador natural, por lo que puedes ser actor, escritor o músico. Estás motivado por la compasión, la empatía y la generosidad y te sientes atraído por ayudar a las personas en la vida cotidiana. Estos rasgos significan que eres una compañero excelente para la persona que tiene la suerte de salir contigo.

Con el Índigo tienes una energía de color profundamente espiritual; sueñas vívidamente y tienes una imaginación extraordinaria que a veces parece como si dieras un vistazo a otro mundo. Tu gran sensibilidad hacia el mundo de los espíritus significa que eres excepcionalmente intuitivo, al nivel que las personas te han descrito como "psíquico". Sin embargo, a pesar y tal vez debido a estas habilidades, el futuro es algo que te asusta

Eres un visionario y eres alguien que puede soñar despierto y cambiar el mundo con amor espiritual. Eres sincero y sobresales en todos los campos de la comunicación. ¡Ten cuidado de perderte demasiado en las nubes y recuerda volver a la realidad de vez en cuando!