Mitos y realidades de la comida enlatada
Mitos y realidades de la comida enlatada
Un grupo de expertos nos revela los principales mitos y realidades de la comida enlatada
Un grupo de expertos nos revela los principales mitos y realidades de la comida enlatada
Mito. Los alimentos enlatados no conservan sus propiedades nutrimentales
Realidad. Los alimentos enlatados conservan muchas de las propiedades nutrimentales de los alimentos por más tiempo. Por ejemplo: Las arvejas o chícharos refrigerados pierden 77% de la vitamina C en un periodo de 7 días, mientras que enlatados se conservan durante más de 3 años
Mito. Los alimentos enlatados contienen plomo
Realidad. Se cree que debido a la soldadura que se usa para sellar las latas, éstas podrían contener plomo; no obstante, actualmente los productos enlatados sólo son cerrados herméticamente y con soldadura eléctrica, por lo que no hay manera de que contengan plomo.
Mito. Las latas no son amigables con el medio ambiente cuando se desechan
Realidad. La descomposición de una lata de acero tarda de 3 a 10 años, mientras que otros materiales como el plástico y el vidrio pueden tardar hasta 1000 años en descomponerse. Al desecharse, las latas de acero inician su proceso de oxidación, permitiendo reincorporar al ecosistema las propiedades de sus minerales.